domingo, noviembre 13, 2016

El fenómeno Trump

Acaso alguien imaginó que un excéntrico multimillonario, xenófobo declarado, anti musulmán y que detesta a los mexicanos  tuviera en sus manos los códigos nucleares de la potencia mundial más grande, o acaso nadie lo vio venir. 
Bien lo decía García Márquez en el Otoño del patriarca: “cuando yo me muera volverán los políticos a repartirse esta vaina como en los tiempos de los godos, ya lo verán, decía, se volverán a repartir todo entre los curas, los gringos y los ricos, y nada para los pobres, por supuesto, porque ésos estarán siempre tan jodidos que el día en que la mierda tenga algún valor los pobres nacerán sin culo, ya lo verán." Y es que el día que la mierda tenga algún valor los pobres nacerán sin culo, pero eso es aplicable a la estupidez humana y al populismo que nos consume como humanidad.

Muchos llaman lo que sucede con Trump, el fenómeno Trump porque lo asocian con algún tipo de liderazgo, sin embargo siendo más prácticos y menos filósofos se puede entender que ese llamado fenómeno no es más que la representación de la clase media gringa por un discurso bien acogido, de eso que es la esencia del gringo promedio, eso que los hace sentirse dueños del mundo sin importar lo que el mundo piense de ellos, fenómeno que no se entiende más allá de ser una contrapropuesta y salto al vacío en un mundo que evoluciona, y que en esta globalización las decisiones gringas nos afectan a todos por igual.
Los que han elegido el llamado fenómeno le han dado la espalda a la mejor América que se ha construido en años, una América con el mejor presidente que yo haya conocido para ese país, pero más allá de eso, las razones de peso de que los códigos nucleares los tenga Trump en sus manos están dados por comentarios como: "Voto por Trump no porque estoy seguro será un buen presidente, Voto por Trump porque mi Voto no lo voy a dar a una persona corrupta, socialista, quien quiere fronteras abiertas, traer a miles y miles de refugiados sirios, donde este programa será un Caballo de Troya donde entraran muchísimo musulmanes extremistas radicales. Donde el terrorismo tendrá las puertas abiertas como nunca antes para hacer daño y tomen como referencia a Francia, Alemania, Bélgica y muchos más. Voto por Trump por fronteras más seguras. Voto por Trump por mi derecho constitucional a tener armas sin que el gobierno use el tema como un asunto político. Voto por Trump porque la única forma de traer trabajo de regreso a USA es justamente incentivar a las grandes empresas a hacerlo y no lo que propone Hillary al subirles los impuestos." Ese discurso populista lleno del sentimiento de odio que abunda en las clases medias en estos años, es lo que ha consolidado lo que algunos llaman fenómeno, pero más allá de fenómeno es la canalización de la ira gringa entre los ciudadanos que eligieron en Noviembre saltar al vacío.
Estos comentarios son de un latino que hace más de 20 años emigró a los Estados Unidos y que ha olvidado parte de la esencia latina y lo que fue en algún momento irse de Suramérica hoy repudiado por el discurso xenófobo del nuevo presidente de los gringos, creo que Trump no es ningún fenómeno por sí solo, opinó más bien que los demócratas se la pusieron muy fácil con Hilary como candidata y todo el odio que los gringos sienten hacia ella lo canalizaron el 8 de Noviembre, pero sobre todo esa sensación de gringo clase media sin estudios universitarios que representa una enorme mayoría.
Lo dijo Franklin D. Roosevelt  "a lo único que debemos tener miedo es al propio miedo”. Ese miedo que ha llevado a que este año sea el más absurdo políticamente hablando, donde los ingleses clamaron por salirse de la Unión Europea, los colombianos rechazamos la paz porque así no nos gustaba y los Gringos escogieron un salto al vacío con un inexperto político, pero sobre todo una persona poco cualificada y demasiado emocional, racista, misógina pero aclamada por quienes entendieron que ese discurso los volverá a hacer grandes en el mundo, como si alguna vez lo hubiesen dejado de ser.
Con la victoria de Trump nos encontramos de repente sin brújula en tierra desconocida. El electorado estadounidense ha preferido un narcisista ignorante, vulgar, racista y descontrolado como presidente a una mujer seria, inteligente y capaz como Clinton. Ha puesto a un loco a cargo del manicomio: lo cual daría risa si uno no se parara a pensar que el manicomio en cuestión es la potencia nuclear número uno del mundo. Al final el fenómeno seguro no se dará como muchos piensan, no es fácil hacer lo que prometió, sin embargo el susto sigue ahí.

Perlas 
  • Mientras en Barranquilla se darán el lujo de tener dos estadios con especificaciones FIFA en Santa Marta hacen bombos y platillos con un estadio de ciudad intermedia apenas para 15 mil aficionados. Hágame el favor y engañen a otros. 
  • Si se pudo, se pudo hacer un acuerdo de paz mejor, ahora solo esperamos que quienes se oponían al primer acuerdo no sigan oponiendose, todos debemos ceder.

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